sábado, 24 de agosto de 2013

ARTURO MUSKUS: LE DEDICO ESTA POESIA A TODOS AQUELLOS QUE SATURADOS POR EL ODIO APOYAN ESTAGUERRA EN COLOMBIA.

                                   Mi hijo... un héroe muerto.



  I
¿Y dónde está tu hijo…mujer?
Se lo entregué vivo a la patria
regresó lívido y frío en un ataúd
y no quiero honores ni banderas
no quiero este héroe muerto
prefiero un cobarde y bruto a mi lado
lo quiero vivo y con aliento.

II
No me importan los honores
nada lo hará vivir
¿honores de qué?
honores al político que engaña y roba
honores al juez que es sobornado
honores al que extermina para ser compensado
honores al potentado que somete al siervo
honores al que expropia al olvidado
honores al que compra la conciencia del iletrado
honores de qué?

III
Devuélvanme a mi hijo, infames
¿qué vienen a hablar de patria
si ustedes no la sienten por dentro?
No me importa esta patria con mi hijo muerto.
Murió inocente en primavera
lárguense de este rancho, ahora
un honor no callará mi llanto
por el que llevé en mi ser por dentro.

IV
Ese que amamanté en largas noches de vela
ese que alimenté con mi virtud y en la pobreza
ese que corrió libre en la campiña verde
ese que sentí mío y apreté en mi pecho
Ahora no está
Y los que piden sangre, ¿dónde están?

V
Nada callará mi llanto.
Nadie previó esta amargura mía
solo se actúa por lo que es de interés
soy muy poca cosa para ser valiosa
en una patria que el poder se remunera
y ahora me consuelan con una bandera
y callan mi dolor con un honor.

VI
No más honores y lárguense, soldados,
déjenme sola con mi dolor de madre
quiten esa bandera del féretro de mi hijo
no quiero fusiles, trompetas ni condolencias
que él murió por nada
porque los infames que originan la guerra
gozan de fortuna y amparo por siempre
no merecen este sacrificio humano,
están vivos y gozando placeres.

VII
Y mi hijo ahora está muerto.
¡Váyanse, soldados!
que aunque sé de su dolor
pocos merecen sus vidas nuevas.
Váyanse, doctores de la patria,
con sus vestimentas a la moda
sus fragancias exclusivas
y sus compasiones de palabras raras.

VIII
No me detallen su muerte
ni dónde fue el combate
déjenme sola con mi dolor
déjenme sola en mi pobreza,
déjenme con mi tristeza, soldados
los que caen siempre son los nuestros
no quiero honores militares.
Arturo Muskus